MIME-Version: 1.0 Content-Type: multipart/related; boundary="----=_NextPart_01D5C643.FEC3C910" Este documento es una página web de un solo archivo, también conocido como archivo de almacenamiento web. Si está viendo este mensaje, su explorador o editor no admite archivos de almacenamiento web. Descargue un explorador que admita este tipo de archivos, como Windows® Internet Explorer®. ------=_NextPart_01D5C643.FEC3C910 Content-Location: file:///C:/C912504E/04LaResponsabilidadSocialCorporativacomofactordeterminanteenlaInversionExtranjeraDirectaenPanama..htm Content-Transfer-Encoding: quoted-printable Content-Type: text/html; charset="windows-1252"
La
Responsabilidad Social Corporativa como factor determinante en la Inversión
Extranjera Directa en Panamá.
Fernando T.
Tomas de Cavia1*
1UDIMA- Universidad de Madrid, Doctorando =
en
Derecho Económico y Societario, Departamento de Administración y Dirección =
de
Empresas.
*Autor para
correspondencia. Email: de.cavia@hotm=
ail.com
Recibido: 04 de jul=
io de
2018
Aceptado: 10 de ago=
sto de
2018
_______________________________________________=
_________________________________________________________Resumen
En esta investigaci=
ón
se analizará la Responsabilidad Social Corporativa (RSC) como factor
determinante en la Inversión Extranjera Directa (IED) en Panamá y el rol de=
las
empresas multinacionales en la misma. El
pequeño país Centroamericano atrae el 45% de la IED regional, la cual supon=
e un
9,6% del PIB panameño. Eso, sin =
duda,
contribuye a la excelente ratio de crecimiento económico de la economía
panameña, que se proyecta será del 5,6% para el año 2018, así como al
incremento de la competitividad y productividad de sus empresas. Se intuye que los modelos empresariale=
s que
consideran la RSC como parte de su estrategia competitiva, están en mejores
condiciones para conseguir una mejor posición en las licitaciones públicas y
privadas, lo cual repercute en una mayor facilidad para invertir a largo pl=
azo
en el país. La RSC supone un hecho
diferencial esencial entre los modelos de negocio europeos y los asiáticos,
contribuyendo los primeros al desarrollo global de las economías en las que
invierten, mientras que los segundos no lo hacen al no contar con la RSC en=
tre
sus políticas.
Palabras clave:
Inversión Extranjera Directa -
Responsabilidad Social Corporativa – Panamá - RSC como estrategia competiti=
va.
Abstract
In this investigation, Corporate Social Responsibi=
lity
(CSR) will be analyzed as a determining factor in Foreign Direct Investment
(FDI) in Panama and the Spaniard business model rol. The small Central Amer=
ican
country attracts 45% of the regional FDI, which represents 9.6% of Panamani=
an
GDP. This fact, undoubtedly contributes to the excellent economic growth ra=
te
of the Panamanian economy, which is projected to be 5.6% by 2018, as well as
the increase in the competitiveness and productivity of its companies. We
consider that business models that consider CSR as part of their competitive
strategy are in better conditions to achieve a good position in public and
private tenders, which results as a greater ease in the long term investing
policies in the country. CSR is an essential differential fact between Euro=
pean
and Asian business models, due to the fact that European companies contribu=
te
to the global development of the economies, while the Asian ones do not do =
so
because they do not have CSR among their policies.
Key wo=
rds:
Foreign Dir=
ect
Investment - Corporate Social Responsibility – Panamá – Corporate Social
Responsibility as a competitive strategy.
1 Estado actual del tema
a.
IED. Concepto, bondades e inconvenientes.
Podemos
definir la Inversión Extranjera Directa (en adelante, IED) como la colocaci=
ón
de capitales a largo plazo en algún país extranjero. La quinta edición del
Manual de la Balanza de Pagos del Fondos Monetario Internacional, FMI (2014)
ofrece la siguiente definición: “Inversión Directa es la categoría de inver=
sión
internacional que refleja el objetivo de la obtención de un interés duradero
por parte de una entidad residente en una economía, en una empresa resident=
e en
otra economía. El interés duradero
implica la existencia de una relación a largo plazo entre el inversionista
directo, la empresa y el grado significativo de influencia del inversionista
sobre el manejo de la empresa”. Es=
ta
inversión de capital se puede realizar por parte de una persona física o de=
una
persona jurídica. En el país de d=
estino
de los fondos, la entrada de estos tiene diferentes modelos, pudiéndose
gestionar la creación de una nueva planta productiva, la creación de una
filial, el establecimiento de una matriz (a eso se le denomina “greenfield”=
), u
optar por la participación en empresas locales ya constituidas o
emprendimientos ya existentes (conocido como “brownfield”).
La
Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, OCDE (2011), la
califica como uno de los principales motores de la globalización. Asevera q=
ue
es una herramienta que permite el crecimiento de las economías, el incremen=
to
de la competitividad, complementa el ahorro y la inversión nacional, aporta
nuevas tecnologías, tiene un impacto positivo en la investigación científic=
a,
fomenta el desarrollo de infraestructuras de comunicaciones y transporte,
mejora el nivel de bienes y servicios, facilita y fomenta la capacitación de
los trabajadores locales y, en definitiva, supone un estímulo para todo aqu=
ello
que ayude a producir más y mejor en el país receptor de la misma. Dicha organización establece que la IED=
tiene
por objeto ejercer el control a largo plazo de la empresa adquirida o
participada y para ello, el porcentaje de participación sobre la misma ha de
ser como mínimo del 10%. En todo =
caso,
la intención de obtener un “interés a largo plazo” parece ser el componente
crucial a la IED y eso se consigue mediante el control político y de gestió=
n de
la empresa objeto de la inversión.
La
IED es uno de los motores del desarrollo en las economías capitalistas,
especialmente para las economías receptoras de la inversión. Su implementac=
ión
comenzó a ser relevante a partir de la década de los años 80, cuando organi=
smos
como el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial promovieron que la=
IED
se convirtiera en una de las principales fuentes de financiación de los paí=
ses
empobrecidos. Los agentes que mej=
or
favorecieron el desarrollo de la IED fueron las empresas transnacionales y,=
lo
hicieron, principalmente. a través de fusiones y adquisiciones
transfronterizas, lo que constituyó un 88% del total de la IED, ya que la
inversión directa en constitución de nuevo tejido productivo supuso, tan so=
lo,
el 12% restante. Eso repercute,
ineludiblemente, en un fenómeno frecuente en el actual contexto de
globalización, que es la cada vez mayor concentración de capitales. Según la United Nations Conference on T=
rade
and Development, UNCTAD (2003), la IED tiene el potencial de generar empleo,
aumentar la productividad, transferir conocimientos especializados y
tecnología, siendo todo ello preponderante para el desarrollo económico y
social de los países que presentan menor capacidad de desarrollo, al mismo
tiempo que es una fuente de incremento de la riqueza para la empresa
inversora. A todas luces, parece u=
na
estrategia de ganar & ganar, de la que se benefician emisores y recepto=
res
de dicha inversión. Galeza (2015)
Sin
duda, la IED presenta una serie de ventajas, pero también puede suponer
inconvenientes, para los países que la perciben. Entre las ventajas se encuentran las ya
mencionadas, OCDE (2011), aunque podemos añadir algunas otras. El increment=
o de
la recaudación fiscal (aunque la misma puede quedar condicionada por las
políticas fiscales de atracción de IED), el beneficio en la balanza de pago=
s,
el hecho de que las aportaciones directas son “menos volátiles” que la
inversión en cartera (en la que los inversores pueden retirar sus fondos de
forma repentina) el incremento de la competitividad general del país (ya que
los empresarios locales se ven obligados a mejorar su productividad para se=
guir
siendo competitivos), o el incremento de los volúmenes de negociación y la
variabilidad de productos y servicios, suponen sin duda un efecto positivo =
para
la economía del país receptor. En
contraposición, existe también corrientes de opinión contrarias al efecto
positivo de la IED en los países receptores, Garay (2015), ya que se consid=
era
que su repercusión directa en muchos países repercute en graves impactos en=
el
desarrollo humano. Entre estas repercusiones negativas se encuentra la
mercantilización de bienes y servicios fundamentales para la vida digna de =
la
población local, la exclusión del acceso a dichos recursos por parte de las
mayorías sociales y la transformación de los derechos universales en
mercancías. Ejemplos de ello son la explotación comercial de bienes como el
agua o el suministro eléctrico, la privatización de servicios médicos, las
coberturas sociales y planes de pensiones, los daños medioambientales que
producen determinadas actividades extractivas, el trasvase neto de riqueza
hacia las economías más avanzadas y, en definitiva, el fomento y crecimient=
o de
la desigualdad entre los países de origen y destino de la IED.
Varios
factores influyen en la decisión de una compañía a la hora de acometer una
inversión directa, pero sin duda la maximización de su beneficio es un pote=
nte
motor que la fomenta. Dicha maximización de beneficio no solo proviene del =
incremento
de la actividad comercial y de venta, también en la búsqueda de oportunidad=
es
en la rebaja de costos. Si sus co=
stos
locales son superiores a los costes de establecerse en el extranjero,
considerando aranceles, barreras comerciales a la entrada, transportes,
impuestos, lo que en el mundo de la empresa denominamos como “costes de
nacionalización”, entonces acomete la decisión de invertir en el
extranjero. En relación a lo
anterior, podemos establecer dos modelos de IED:
IED
vertical: La empresa invierte en un país extranjero con la idea de producir
elementos que posteriormente formarán parte de un producto más complejo.
IED
horizontal: Consiste en invertir en un país extranjero duplicando en el mis=
mo
los procesos de producción o servicios realizados en su país de origen. Eso=
se
produce con la finalidad de evitar los aranceles de entrada, o también busc=
ando
obra de mano cualificada o recursos tecnológicos específicos en el país en =
el que
se invierte. La IED horizontal pre=
senta
menos relevancia que la vertical. =
Un
buen ejemplo sería el de la multinacional sueca IKEA, que establece plantas=
de
producción de sus productos en cada país en el que tiene presencia, puesto =
que
el coste de transporte de sus materiales es excesivamente caro para concent=
rar
su distribución en Suecia y transportar los productos por vía marítima.
b.
Modelos teóricos de IED
El
estudio de la IED es un tema complejo debido a los diversos factores que
intentan explicar los motivos por los cuales una determinada empresa decide
acceder a un mercado exterior mediante el establecimiento de filiales,
sucursales, o por la participación en empresas locales ya constituidas o
emprendimientos ya existentes (Hernandez ed al.,2007). Las teorías sobre la=
IED
surgen como respuesta a los interrogantes a los efectos que la misma genera=
en
la economía mundial. Es de destacar que no existe una teoría única, puesto =
que
no existe un enfoque universalmente válido que se adapte a cada caso, sector
económico o área geográfica, presentado todos ellos motivaciones
diferentes. Las principales corrie=
ntes
teóricas que pretenden aportar una explicación científica a dicha materia s=
on
las siguientes:
El mod=
elo
neoclásico: Prevalente hasta los años setenta,
Alonso (2003), se basa en los siguientes supuestos teóricos:
-
La
maximización de los beneficios económicos, gestionando aquel nivel de
producción que permita una mayor diferencia entre ingreso y costo total.
-
El ent=
orno
competitivo perfecto, que implica (i) que la empresa vende un producto
estandarizado, sustituto del que venden sus competidores, (ii) que la ofert=
a de
producto no afectará al precio de mercado, (iii) que los factores de produc=
ción
son móviles a largo plazo, pudiendo aprovechar las oportunidades rentables =
que
surjan en otras ubicaciones geográficas, y (iv) existe un modelo de informa=
ción
perfecta entre empresas y consumidores.
-
La
igualdad, a largo plazo, de los precios, costos, factores de producción,
capital y trabajo entre las diferentes industrias.
-
La
existencia de funciones de producción homogéneas y rendimientos constantes a
escala.
-
Produc=
tividades
marginales decrecientes, que establece que, traspasado un determinado punto=
, el
marginal disminuye conforme aumenta el factor variable. Eso motiva que el
retorno de los factores de producción sea menor a medida en que crece la
actividad productiva.
Evidentemente,
este modelo presenta grandes incongruencias en cuanto a su efectividad y no
toma en consideración todas las motivaciones de las empresas para invertir =
en
otros países diferentes al suyo. Esta aproximación utópica ha quedado
descartada por diferentes estudios empíricos y, por lo tanto, no será
considerada como modelo teórico que me permita confirmar las hipótesis que
planteo.
La teo=
ría
de la imperfección de los mercados, los oligopolios y la ventaja empresaria=
l: Esta teoría, Hymer (1958), plantea que la explicación =
a la
IED debía buscarse en las imperfecciones de los mercados. Determinó que la IED predominaba en com=
pañías
del tipo oligopólicas, de forma que las empresas nacionales, al perder su
posición de oligopolio en su país de origen, buscan la fabricación del mismo
producto en países extranjeros para mantener su control en los mercados.
El mod=
elo
de Organización Industrial: Este modelo se basa en (i) la presencia=
de
barreras de entrada de nuevos competidores en las industrias oligopólicas y,
(ii) la interdependencia entre las empresas que operan en situaciones de es=
casa
competencia. Vázquez (2003). Las barreras de entrada se basan en estrategia=
s de
diferenciación de productos, la superioridad de las empresas ya establecida=
s y
las economías de escala en los procesos de producción y distribución. La interdependencia entre las empresas =
se
basa en las reacciones de las empresas como consecuencia de las decisiones =
de
sus empresas competidoras. El mod=
elo
mide el grado de imperfección o sustituibilidad de los productos de la
industria, por parte de los compradores.
Por ejemplo, los consumidores pueden preferir consumir productos de
empresas locales en lugar de hacerlo en productos de empresas extranjeras.<=
span
style=3D'mso-spacerun:yes'> El modelo propone que una vez que el
crecimiento de una determinada industria comienza a disminuir o estancase e=
n su
país de origen, es mas probable que la empresa decida invertir en el extran=
jero
comercializando el mismo producto, en lugar de invertir en su propio país de
origen diversificando su cartera de inversiones en una actividad económica
distinta.
La teo=
ría
de la conducta imitativa de los oligopolios:
Establecida por Knicherbocker, (1973), promulgó que las empresas en régimen=
de
oligopolio buscan mantener su posición competitiva en los mercados nacional=
es e
internacionales. De esa forma, las empresas competidoras imitarán la conduc=
ta
de invertir en el extranjero con la finalidad de mantener el equilibrio y l=
as
mismas condiciones de riesgo entre todos los participantes del oligopolio s=
in
distinción de localización del mercado.
Esto puede incluso inducir a mantener tasas de retorno pobres o
negativas durante un cierto período de tiempo, pero el objetivo principal e=
s no
perder el grado de participación en el mercado.
La teo=
ría
del ciclo de vida del producto: Basa=
do
en los supuestos de la investigación realizados en la tesis doctoral de ,
Vernon (1966), en la Universidad de Hardvard, la idea fundamental es que las
características económicas de un producto cambian con el tiempo puesto que =
cada
vez es más fácil apropiarse de los conocimientos necesarios para su
producción. Identifica tres fases =
en la
vida del producto (i) introducción del producto en el mercado, (ii)
estandarización y, (iii) maduración del producto. En el lanzamiento del producto, los alt=
os
costos de producción no justifican la inversión directa. En la estandarizac=
ión
se optará por exportar al producto al extranjero. No será hasta llegada esta tercera fase=
, que
las empresas decidirán invertir directamente en el extranjero para recomenz=
ar
en otro país un nuevo ciclo de vida del producto, en vista de la competencia
desarrollada por los competidores en el mercado doméstico. En definitiva, la maduración del produ=
cto
motiva la necesidad de que la empresa instale filiales en el extranjero, así
como la diseminación del conocimiento.
El mod=
elo
de la innovación tecnológica: Con =
la
finalidad de explicar el fenómeno de la IED, Krugman (1997) estableció que =
el
comercio internacional es el resultado de un proceso continuo de innovación
tecnológica, ya que fluye desde los países desarrollados hacia los países en
vías de desarrollo. Por lo tanto, =
la
transferencia de tecnología sería parte integral del proceso de desarrollo =
del
comercio internacional y de los procesos de transferencia de capitales, ya =
que
la tecnología es un proceso dinámico, en constante cambio que fomenta las
inversiones de capital.
La
teoría de la interiorización de mercados y la apropiabilidad: Buckley (1998=
),
determina que las razones por las que las empresas efectúan inversiones es
transformar relaciones de mercado en relaciones de propiedad de las empresas
colaboradoras, es decir, se busca adquirir la empresa suministradora con la
finalidad de asegurar el suministro de materias primas y así asegurar la ca=
dena
de producción o cadena de valor de la organización. La IED ocurre cuando se “internalizan”
actividades interdependientes que se realizan en diferentes países, ya que =
eso
es más eficiente que realizarlo a través de relaciones comerciales
contractuales. En coherencia con ese concepto, Magee (1977) planteó el tema=
de
la “apropiabilidad” de la información generada por las grandes empresas
multinacionales, entendida como la capacidad de los propietarios de la
información, o la tecnología, para apropiarse de los beneficios económicos
derivados de dicho conocimiento. =
Para
ello, el mejor mecanismo de protección es la IED, por lo que una empresa ma=
triz
crea filiales en el extranjero que, además, contribuyen al rendimiento
económico global de la empresa.
El Mod=
elo
Heckscher-Ohlin: Este modelo fue
formulado por el economista sueco Bertil Ohlin, modificando el teorema inic=
ial
de su maestro Eli Heckscher, Ferná=
ndez
(1971), Y predice un patrón de comercio internacional basado en los diferen=
tes factores
de que disponen las distintas naciones y ofrece la primera justificación al
desplazamiento internacional de capitales entre países “capital-abundantes”=
a
los países “trabajo-abundantes”, argumentando que los países excedentes en
capital irán a buscar recursos humanos con menor coste a los países con exc=
eso
de oferta de mano de obra barata. Asimismo, afirma que los países se
especializan en la exportación de los bienes de los que disponen con más
abundancia y aportan mayor competitividad, importando bienes de los que se
encuentran más escasos o son menos competitivos.
La teo=
ría
Ecléctica:
Ninguna de las anteriores teorías ha tenido éxito en explicar la IED=
en
su totalidad. La Teoría Ecléctica
establecida por Dunning (1977) se nutre de los distintos esquemas, intentan=
do
conciliar las diferentes teorías.
Sostiene que la IED es realizada por razones funcionales y
organizacionales, además de por razones de tipo financiero como son el reto=
rno
y la rentabilidad. Entre estas
razones, destacamos las siguientes:
-
La emp=
resa
inversora prefiere ser propietaria del activo productivo que otorgar una
licencia para la producción en el extranjero.
-
Al
realizar una inversión en el extranjero, la empresa conserva el control sob=
re
el mercado de su producto.
-
Existen
razones de ahorro de costos que justifican, en muchas ocasiones, la ubicaci=
ón
de empresas y procesos productivos fuera del mercado doméstico.
Dunning
(1977) afirma que una empresa nacional tiene varias opciones para crecer,
con
diversificación horizontal o vertical, adquiriendo otras empresas, o
explotando mercados extranjeros. C=
uando
elige esta última opción se convierte en una multinacional que atiende a
mercados foráneos, lo que no implica que produzca en los mismos a no ser que
cuente con ventajas adicionales de propiedad exclusiva o compartida que la
permita competir con firmas locales, a pesar de los costos añadidos. El autor, combina elementos de ventaja
comparativa internacional con otros elementos propios del comportamiento
individual de las empresas, consiguiendo, de esta forma, reunir en una sola
teoría, las explicaciones basadas en el comercio internacional y las basada=
s en
la organización industrial, consideradas hasta ese momento de forma separad=
a.
Introdujo el modelo OLI (Ownership-localization-internalization /
propiedad-localización-internalización) a la hora de determinar por qué una
compañía opta por la implantación de una planta productiva en el extranjero=
en
lugar de exportar a partir de una base doméstica. Basado en ello, las
multinacionales invierten en el exterior para explotar las tres acepciones
anteriores:
-
Propie=
dad: Por ejemplo, los derechos y patentes,
procesos y otros elementos no disponibles para los competidores.
-
Locali=
zación: Entendida como las ventajas derivadas d=
e la
situación local, como pueden ser los recursos naturales, la mano de obra ba=
rata
u otros recursos locales.
-
Intern=
alización:
Entendiendo que es mejor que algunos activos sean propiedad de la empresa q=
ue
tener que comprarlos en el mercado.
Esto puede incluir el equipo de management.
La Sen=
da
del Desarrollo de la Inversión Extranjera Directa:
El propio Dunning (1977) conjuntamente con otros autores (Dunning y Narula,
1996) (Durán y Úbeda, 205:31) proponen que (i) los países cambian
estructuralmente gracias al crecimiento, (ii) dicha estructura y nivel de
desarrollo se vincula a la IED que emite y recibe y, (iii) existe una relac=
ión
directa entre las dos variables anteriores, es decir, entre el nivel de
desarrollo y la IED. Distinguen ci=
nco
fases en función del nivel de desarrollo de los países:
-
Fase 1:
Los países subdesarrollados y con alto riesgo país no presentan ventajas pa=
ra
atraer la IED. Se utiliza de ellos los recursos naturales e importan los
productos que consumen, ya que no existe un tejido industrial interno.
-
Fase
2: Países con algún mercado concre=
to más
desarrollado, cuya prioridad son los recursos en infraestructuras sociales,
principalmente salud y educación.
-
Fase
3: Países receptores de IED a nivel
débil. Su sector servicios comienza a desarrollarse, comienza a producirse =
con
calidad y cierta I+D. Se inicia la diferenciación, la producción masiva de
bienes y existe una mejor cualificación y educación superior. La ventaja competitiva de las empresas=
se
basa en la generación de activos diferenciados.
-
Fase
4: País fuertemente integrado en l=
a IED
mundial, tanto en términos cualitativos como cuantitativos. La ventaja productiva se base en factor=
es
creados, no en recursos naturales o mano de obra económica. Se compite en los mercados internaciona=
les,
en ambas direcciones, con países que presentan un nivel de desarrollo simil=
ar.
-
Fase 5=
: Es
una transición de la fase anterior como consecuencia de alcanzar un mayor n=
ivel
de desarrollo económico. Sus ventajas competitivas y estructuras industrial=
es
motivan que las empresas multinacionales busquen la deslocalización de sus
procesos hacia países que se encuentren en fases más incipientes. Las alian=
zas
estratégicas, fusiones y adquisiciones buscan la eficacia.
Teoría
derivada de los organismos financieros internacionales (FMI y Banco Mundial=
): Como promotor=
es del
pensamiento neoliberal, la IED responde vigorosamente cuando se han
restructurado las economías de acuerdo con el patrón impuesto por dichos
organismos. Según este supuesto, la
inversión extranjera es muy vulnerable a la fiel observancia de las polític=
as
ortodoxas.
Además
de las anteriores teorías existen =
otras
consideraciones teóricas y empíricas que sugieren otras variables
relevantes para determinar la IDE entre los países: PIB, tipo de cambio, política fiscal, m=
ercado
de trabajo (costes salariales, productividad, grado de cualificación
profesional), disponibilidad de materias primas, infraestructuras de
comunicaciones y logística, tamaño del mercado, estabilidad económica y
política, expectativas, etc. son aspectos que sin duda tienen su grado de
relevancia a la hora de que una empresa decida invertir capitales a largo p=
lazo
en un país extranjero.
c.
Modelos
teóricos de la RSC en relación a la IED
El
proceso de globalización ha presentado importantes desafíos en los países en
vías de desarrollo. La IED se ha
configurado como un importante elemento de desarrollo, lo que ha empoderado=
a
las empresas multinacionales. Eso =
ha
motivado que los gobiernos hayan legislado de forma que se atraiga la IED,
olvidando en muchos casos fomentar las mejoras sociales, medioambientales o=
de
buen gobierno, evitando la corrupción y facilitando la transparencia en las
operaciones de inversión. La aplic=
ación
de políticas de RSC parece inevitable para asegurar que las ventajas y
beneficios que aporta la IED, minorando al mismo tiempo sus repercusiones
adversas. Analicemos a continuaci=
ón las
diferentes corrientes que se han aproximado a esta relación entre RSC e IED=
:
Hipóte=
sis
de RSC eficiente: Expuesta por HAS=
AN,
R. (2013), Es una proposición fácilmente demostrable que las multinacionales
velan más por lo intereses sociales y de la “sociedad civil” en países
desarrollados que en los que están en vías de desarrollo y esto se debe a l=
as
acciones de las ONG en particular, que han luchado contra los efectos negat=
ivos
que han causado este tipo de empresas en los países no desarrollados, con
sociedades civiles débiles. Los
gobiernos y multinacionales no han tenido más remedio que considerar los
requerimientos de las ONG en cuanto a trabajo infantil, bajos salarios,
condiciones laborales precarias, excesivas jornadas laborales o acoso
sexual. Una repercusión inmediata=
de
ello ha sido la adopción de medidas de RSC por parte de las multinacionales,
que han tenido que respetar sus obligaciones sociales.
Bajo
una hipótesis de salarios eficientes, el autor postula la “hipótesis de RSC
eficiente”, ya que se incrementa la productividad de los trabajadores y la
lealtad de estos, lo que repercute en la rentabilidad a largo plazo. El punto óptimo se encuentra en el pun=
to
donde el salario marginal no eclipsa el incremento de productividad. De forma similar, las compañías pueden
adoptar estándares de RSC hasta el punto en el que su incremento no fomenta=
el
incremento de la fidelidad de sus clientes. Este enfoque presenta el proble=
ma
de entender la RSC como una necesidad económica más que ética, de forma que=
no
contradiga el imperativo de maximización del beneficio. Podemos postular que
las compañías han optado por alcanzar un nivel de RSC que maximice sus
operaciones y beneficios, considerando todos los factores sociales,
medioambientales y de buen gobierno. Las ONG insisten en que el estándar que
las multinacionales aplican en los países desarrollados, debe ser el mismo =
que
aplican en los que están en vías de desarrollo, pero la realidad es que no =
son
requeridos a ello por parte de los países que reciben la IED. Una RSC eficiente, debería ser la misma=
en
ambos tipos de países.
Modelo=
de
“inversión Sostenible” (IS) a través de los procesos de “Inversión Extranje=
ra
Directa” (IED) con el objetivo de alcanzar un “Desarrollo Sostenible” (DS):=
Propuesto por NARULA, K. (2012), el autor profundiza en =
el
concepto de desarrollo
sostenible y su marco de actuación.
-&nb=
sp;
Desarr=
ollo
Sostenible: Se define como aquel
desarrollo que aúna las necesidades del presente sin comprometer las
necesidades de futuras generaciones de cubrir sus propias necesidades, de f=
orma
que las mismas dispongan de, al menos, los mismos recursos de los que
disponemos nosotros hoy. Este con=
cepto
se desglosa en varios aspectos:
· =
Marco =
de
actuación: Se centra en mecanismos institucionales necesarios para que el
crecimiento económico se dirija hacia la trayectoria deseada. Lo anterior implica internalización de =
los
principios de DS, lo que significa “compromiso intra generacional” como
principal idea. Para ello es necesario disponer de herramientas de medición=
e
impacto del DS en la economía.
· =
Dimens=
iones:
El DS puede ser categorizado en tres dimensiones que deben estar
interconectadas y relacionadas (i) económica, (ii) social y (iii)
medioambiental.
· =
Princi=
pios:
Entendidos como una aproximación multidimensional a la idea del “compromiso
intra generacional”, de forma que se asegure que las externalizaciones sean
minimizadas y los costes son internalizados con la finalidad de alcanzar el
equilibrio entre crecimiento y gestión sostenible de los recursos.
· =
Vías y
rutas: El principal paso de cada
proyecto es que la disponibilidad de capital, vía inversión, préstamo u otro
tipo de endeudamiento, se alineen con proyectos que contemplen los estándar=
es
de DS mencionados. Si no existe desviación en esta política se puede alcanz=
ar
el objetivo de DS deseado.
· =
Políti=
cas: Se deben definir una vez dispongamos de=
los
objetivos y rutas para alcanzar el DS.
Deben atraer la IED, por mediación de leyes y políticas de
implementación.
· =
Medida=
s e
indicadores: Existen varios criterios, como los “índices de sostenibilidad
medioambiental”, “índices de desarrollo sostenible”, “índice Wellbeing”
-&nb=
sp;
Invers=
ión
sostenible y sus aproximaciones:
· =
Invers=
ión
sostenible (IS): Es una fórmula de inversión que enfoca la economía global
teniendo en cuenta los riesgos y oportunidades económicos, medioambientales=
y
sociales, a largo plazo.
· =
Factor=
es
medioambientales, sociales y de buen gobierno (MSG): MSG es un término gené=
rico
usado en mercados de capitales y por inversores para determinar el desarrol=
lo
financiero futuro de una compañía. Son
un elenco de indicadores no financieros que incluyen sostenibilidad, ética y
buen gobierno.
· =
Invers=
ión
sostenible y responsable (ISR): In=
cluye
cinco tipos de estilos de inversión: Ética, responsable, social, sostenible=
y
utilizando tecnología y energía limpia.
-&nb=
sp;
Concep=
to y
ventajas de inversión sostenible:
IS es inversión=
a
largo plazo, intra generacional, eficiente y honesta. Produce un mejor desarrollo inversor, a=
ctual
y futuro. Pone el foco en la creac=
ión de
valor actual que no comprometa la creación de valor futura. Una forma de integrar los factores de I=
S y la
responsabilidad de los accionistas e inversores, es que estos actúen efectiva y honestam=
ente
controlando los efectos externos y negativos de sus inversiones,
responsabilizándose de minimizar el cambio climático y la explotación de
recursos naturales. Este modelo de
inversión es financieramente más eficiente que el modelo tradicional y, además, más positivo para la sociedad.
Comparativamente, este modelo, ofr=
ece
mayores niveles de retorno, reduce los riesgos del portafolio de inversione=
s y
genera más rentabilidad.
-&nb=
sp;
Princi=
pios
de inversión sostenible (IS) y sus tendencias mundiales emergentes:
· =
Princi=
pios
de inversión responsable (PIR): Lo=
s PIR
consisten en una marco de actuación voluntaria que pretenden aplicar los
conceptos de respeto social, medioambiental y de buen gobierno en los proye=
ctos
de inversión. Se considera que las
contingencias derivadas de su falta de cumplimiento pueden afectar el desar=
rollo
de los proyectos y que su aplicación fomenta el alineamiento entre los
inversores y las necesidades de la sociedad.
· =
Princi=
pios
Ecuador: Se trata de un sistema comparativo que se utiliza en las industrias
para determinar y gestionar los riesgos sociales y medioambientales de
proyectos cuyo importe supera los $ 10 MM.
Estos principios son adoptados por entidades financieras y fondos de
inversión para contribuir al crecimiento de la IS.
-&nb=
sp;
Gestio=
nando
el DS a través de la IS por las compañías:=
Las compañías han adoptado el concepto de “sostenibilidad corporativ=
a”
(SC) incluyendo iniciativas de RSC en sus políticas. Esto conduce a integrar eficiencia soc=
ial y
medioambiental con eficiencia económica.
El “Global Compact” de las Naciones Unidas (UN) es un mecanismo
voluntario que alinea las operaciones empresariales con los principios
universales sobre derechos humanos, medioambiente y modelos
anti-corrupción. Otras iniciativa=
s como
el “Global Reporting Initiative” (GRI) fomentan el uso de indicadores de de=
sarrollo
en forma de “guías de reporting sostenible”, que las organizaciones pueden
utilizar para medir su desarrollo social, medioambiental y económico. Mediante estas prácticas, la globaliza=
ción
conduce a facilitar el avance en mercados, comercio, tecnología y finanzas,=
de
forma que se beneficien las economías y las sociedades alrededor del mundo.=
Líneas
directrices “actualizadas” de la OCDE para empresas multinacionales: La OCDE lleva v=
arios
años estableciendo unos principios generales que orientan a las empresas
multinacionales sobre las normas de conducta que deben aplican en el desarr=
ollo
de sus negocios. Las empresas debe=
rán
tener plenamente en cuenta las políticas fijadas por los países en que ejer=
cen
su actividad y tener en consideración las opiniones de los demás terceros
interesados. A este respecto, las empresas deberán:
1.
Contribuir al progreso económico, social y medioambiental con vistas a logr=
ar
un desarrollo sostenible.
2.
Respetar los derechos humanos de las personas afectadas por sus actividades=
de
conformidad con las obligaciones y compromisos internacionales del gobierno=
de
acogida.
3.
Estimular la generación de capacidades locales mediante una cooperación
estrecha con la comunidad local, incluidos los sectores empresariales local=
es,
desarrollando al mismo tiempo las actividades de la empresa en los mercados
interiores y exteriores de una manera compatible con la necesidad de prácti=
cas
comerciales saludables.
4. Fomentar la formación del capital hum=
ano,
particularmente mediante la creación de oportunidades de empleo y el
ofrecimiento de formación a los empleados.
5.
Abstenerse de buscar o de aceptar exenciones no contempladas en el marco le=
gal
o reglamentario relacionadas con el medioambiente, la salud, la seguridad e
higiene, el trabajo, la fiscalidad, los incentivos financieros u otras
cuestiones varias.
6. Apoyar y defender unos correctos prin=
cipios
de gobierno empresarial y desarrollar y aplicar unas buenas prácticas de
gobierno empresarial.
7.
Desarrollar y aplicar prácticas autodisciplinarias y sistemas de gestión
eficaces que promuevan una relación de confianza recíproca entre las empres=
as y
las sociedades en las que ejercen su actividad.
8. Promover el conocimiento por los empl=
eados
de las políticas empresariales y su conformidad con ellas, mediante una
difusión adecuada de las mismas, incluso a través de programas de formación=
.
9. Abstenerse de tomar medidas
discriminatorias o disciplinarias contra los trabajadores que elaboren, de
buena fe, informes para la dirección o, en su caso, para las autoridades
públicas competentes acerca de prácticas contrarias a la ley, a las Directr=
ices
o a las políticas de la empresa.
10.
Alentar, cuando sea factible, a los socios empresariales, incluidos proveed=
ores
y subcontratistas, para que apliquen principios de conducta empresarial
compatibles con las Directrices.
11.
Abstenerse de cualquier injerencia indebida en actividades políticas locale=
s.
2 La IED en la región Centroamericana y =
Panamá
Analicemos
a continuación el modelo de IED en la Región Centroamericana y posteriormen=
te
identifiquemos la misma en Panamá. Según establece la CEPAL (2017) en su úl=
timo
informe titulado “La IED en América Latina y Caribe 2017”, la región se
encuentra en una difícil coyuntura, en la que la IED regional disminuye un =
7,8%
en 2016, lo que representa una caída acumulada del 16,9% con respecto al ni=
vel
máximo de 2011. Lo anteriormente
expresado queda justificado por la caída de precios en las materias primas =
(que
afectan a las inversiones que buscan los recursos naturales de la región) el
lento crecimiento económico de algunas economías y el hecho de que la
sofisticación tecnológica de la economía digital tiende a concentrar las
inversiones transnacionales en economías más desarrolladas. En definitiva, =
las
economías desarrolladas están mostrando una mayor predisposición hacia la
localización nacional de sus procesos productivos, en mercados con un mayor
componente tecnológico, campo en el que la región de América Latina y Carib=
e no
es pionera.
El
modelo de IED panameño es completamente contrapuesto al modelo regional. La
propia CEPAL (2017) afirma que Panamá percibe más del 45% del total de IED =
de
la región. El informe publicado por PROINVEX, Alemán (2017), denominado “El
Sistema Integrado de Información (One-Stop-Shop) Proinvex” en el que identi=
fica
la relación entre IED y PIB para el año 2016, de los principales países de =
la
Región Iberoamericana, nos puede dar una idea de cómo afecta la IED en la
globalidad de las economías del área. Destaca Panamá con una ratio del 10,8=
9%,
seguido por Brasil con un 8,44%, Bolivia con un 7,33%, Perú con un 6,67% y
Chile Con un 4,64% se configuran como los principales receptores de IED en =
la
región.
Panamá
es, sin duda, la economía de la Región Centroamericana que más se ha
beneficiado de la IED, manteniendo los niveles de competitividad y
globalización más altos de su zona de influencia geográfica. Con 74.177 km²=
y
5.058.372 habitantes censados, INEC (2016), es un destino atractivo y seguro
para el capital nacional y extranjero.
Cuenta con elementos que favorecen la atracción de la IED, entre los=
que
se cuentan (i) la conectividad principalmente marítima, aérea y terrestre, =
(ii)
un sistema financiero robusto y dolarizado desde 1904, (iii) un ambicioso
programa de inversiones públicas y privadas para la próxima década, (iv) un
excelente paquete de incentivos para la inversión extranjera y para el
establecimiento de sedes de empresas multinacionales, (v) un alto grado de
seguridad jurídica y el menor porcentaje de inseguridad personal de la regi=
ón,
(vi) la segunda zona libre más grande del mundo
y (vii) una ubicación geográfica que, en forma de istmo divide el
Continente Americano y facilita tanto el tránsito de buques que su Canal, c=
omo
la distribución de mercancías hacia ambos hemisferios del Continente
Americano. En definitiva, CEPAL (2=
017),
podemos encontrar dos factores detonantes para atraer a la IED, (a) el apoyo
del gobierno local para crear un escenario económico, político y fiscal que
brinde certeza a los inversores y, (b) una posición geográfica que facilite=
el
tránsito de mercancías y personas hacia otras partes del continente.
Factores
como un 5,4% de crecimiento del PIB en 2017,
por encima del resto de la región Centroamericana y Caribe, 7 años
seguidos de incremento de la IED – magnitud que ascendió a $5.766 MM en 201=
7-,
una tasa impositiva del 25%, el IVA más reducido de la región al 7%, un IPC=
del
0,9% en 2016, una tasa de desempleo del 4,8% en el mismo año y una IED que
supone el 9,98% del PIB en el año 2016, INEC (2016), son indicativos de la
importancia de dicha variable en la economía panameña.
Desde
mediados del siglo XIX la IED ha tenido una importante participación en
sectores específicos de la economía panameña. INEC (2017). Los primeros
capitales provenientes de Estados Unidos o de Europa se orientaban a sector=
es
agrícolas, la construcción del sistema ferroviario o la construcción del
Canal. Hacia 1924, la presidencia =
de Belisario
Porras acomete una serie de incentivos para la atracción del capital
extranjero, consciente de la importancia de este en el crecimiento económic=
o.
Pero no es hasta pasada la Segunda Guerra Mundial cuando la IED se incremen=
ta
de forma sostenida al mismo tiempo que se diversifica hacia sectores vincul=
ados
a los servicios y la industria.
Así,
podemos diferenciar entre tres períodos bien caracterizados en cuanto a la
afluencia de IED en Panamá:
Hasta
1990, donde la IED, si es cierto que tiene un rol fundamental en la economía
panameña, se basa en el estímulo de la modesta actividad industrial.
A
partir de 1990, donde los programas de privatizaciones y concesiones de
sectores como el de casinos, ferrocarril y energía, junto con los procesos =
de
fusiones y compra de entidades financieras (Banistmo, HSBC), empresas
alimentarias (Cervecería Nacional, Lácteos La Estrella), comunicaciones (la
empresa compradora fue Telefónica de España, S.A.) y, sobre todo, un fuerte
boom inmobiliario, motivan el rápido crecimiento de la IED en Panamá.
A
partir del año 2006, la explosión de sectores como el inmobiliario (turismo
residencial y segunda vivienda), las fuertes reinversiones de beneficios pa=
ra
la reorganización y modernización de las empresas de la Zona Libre de Colón=
, el
incremento de servicios de intermediación financiera, transporte, logística,
almacenamiento, comunicaciones y suministros, fueron los sectores que
percibieron el flujo de inversiones de capital provenientes del extranjero,
configurando un modelo de IED creciente y sostenible. INEC (2017).
El
hecho de que, en la época reciente, siglos XIX y primera mitad del XX, Esta=
dos
Unidos y Colombia hayan colonizado Panamá, ha sido preponderante a la hora =
de
determinar de dónde provienen los principales recursos de la IED. Según los últimos datos publicados, en =
el año
2016, INEC (2016), Rica (2017), América del Norte (Estados Unidos) aportó el
40% de los recursos de IED, América del Sur (Colombia) aportó el 28% y la U=
nión
Europea el 11%. El resto de Améric=
a Central
y Caribe aportó el 9% y Asia se configuró en quinto lugar con una aportación
del 8%.
Los
tres principales sectores de actividad en los que se invierten capitales
extranjeros en Panamá fueron en 2016, por orden de importancia:
“Comercio
al por mayor y al por menor” (28,31% del total),
“Logística
y transporte” (19,24%)
“Actividades
financieras y de seguros” (18,62%).
Estas
tres actividades, configuran el 66,17% de la inversión en IED para 2016 en
Panamá. Si a esto añadimos “Información y Telecomunicaciones” (9,01%), “Hot=
eles
y Restaurantes” (5,16%), “Explotación de Minas y Carreteras” (4,76%) y
“Suministros de Electricidad, Agua y Gas” (4,31%), observamos que, con 7
actividades económicas, obtenemos el destino de casi el 90% de la IED obten=
ida
por Panamá en el año 2016. INEC (2016)
3 Los modelos de RSC implementados en la
Region Centroamérica y Panamá.
Una
vez analizada la importancia de la IED para Panamá y para la región, debemos
discernir la importancia que para dicha magnitud tiene la Responsabilidad
Social Corporativa (RSC), especialmente aquella derivada de la actuación de=
las
empresas multinacionales que operan en la región Latinoamericana, para lo c=
ual
debemos identificar algunas teorías y tendencias.
En
las últimas décadas, se cifra en más de 100.000 “millones de dólares” la
IED en Latinoamérica, especialment=
e en
los sectores energético, telecomunicaciones, agua, bancarios, seguros,
distribución y construcción, al mismo tiempo que se internacionalizaban
medianas empresas transformadoras =
y de
servicios. (Carballo, 2006). En todo caso, aunque el fenómeno de la =
IED es
idéntico desde el punto de vista estadístico o monetario, no lo es desde el
punto de vista de los objetivos empresariales y en cuanto a la RSC y su
aplicación desde un alcance voluntario u obligatorio. Podemos discernir cuatro tipos de IED =
en
Latinoamérica, según los siguientes criterios:
Modelo
concesional:
Ligado a la prestación de “servicios públicos” en las áreas de
telecomunicaciones, electricidad, petróleo y gas, autopistas y transportes
públicos. Su finalidad es la prest=
ación
de servicios esenciales para los ciudadanos en sustitución de los estados, =
los
cuales controlan esta actividad y la tercerizan. A este modelo corresponde
cerca del 50% de la IED en Latinoamérica, teniendo como protagonistas a gra=
ndes
corporaciones, empresas líderes en su sector, muchas veces provenientes de
privatizaciones del sector público europeo o norteamericano. Su capacidad inversora muchas veces se
caracteriza por mercados en régimen de monopolio u oligopolio, la regulación
tanto de sus actividades como de sus precios de venta por parte de los esta=
dos
y el hecho de que los ciudadanos son los beneficiarios últimos que actúan c=
omo
consumidores en un contexto que pretende mejorar la calidad de vida y el
desarrollo de los países receptores de la inversión.
Modelo
financiero y/o seguros: Ligado a entidades financieras y
aseguradoras, que ha supuesto cerca del 35% de la IED en la región. Esta actividad está regulada por los b=
ancos
centrales de los países en los que invierten y, por lo tanto, está controla=
da.
Los servicios prestados son de interés general y posibilitan una mayor cali=
dad
de vida a los ciudadanos mediante la provisión de seguridad económica.
Modelo=
de
acompañamiento: En el que la
inversión es independiente de las características del país receptor y está
ligada a la necesidad de acompañar a las grandes multinacionales que han
trasladado sus plantas productivas a la región Latinoamericana. Se trata de compañías en los sectores d=
el
automóvil, electrodomésticos, bienes de equipo y similares. Este modelo ha
supuesto aproximadamente el 7% de la IED en la región y su relación con los
estados beneficiarios es escasa ya que sus productos están integrados en la
cadena productiva de grandes empresas multinacionales, por lo que sus
obligaciones y responsabilidades están condicionadas por estas y no por
relaciones con los consumidores o sociedad local.
Modelo= de IED puntual: Enmarcado en la internacionalización empresarial en base a la creaci= ón de filiales o participación en empresas mixtas para satisfacer la demanda d= e un país o de un área geográfica dentro de la región. Es frecuente en empresas medianas de la industria productiva o de servicios, necesitadas de consolidar mercados o a= umentar su ventaja competitiva. No suponen más del 8% de la IED en Latinoamérica. <= o:p>
Realizada
esta distinción, es fácil comprender que las empresas vinculadas al modelo
“concesional”, que suponen la mayoría de la IED en la región, normalmente e=
stán
cotizadas en mercados secundarios de valores con la consiguiente obligación=
de
transparencia y, por tanto, vinculadas a las políticas de RSC propias de su
país de origen. Estas empresas, que
disponen de guías de responsabilidad social, códigos de ética y conducta, a=
sí
como códigos de buen gobierno, garantizan la transparencia, respeto al
medioambiente, buenas prácticas y conductas laborales y/o sociales y, en definitiva, no son ajenas a las
situaciones coyunturales, económicas, sociales y de desarrollo de los paíse=
s en
los que operan. Mucho menos tenien=
do en
cuenta que su acción empresarial es sustitutiva de la acción de las
administraciones públicas para las cuales prestan sus servicios o productos=
.
En
menor medida se encuentra el obligado cumplimiento de las pautas y política=
s de
RSC por parte de las empresas vinculadas al modelo financiero o de seguros,=
ya
que su actividad tiene un carácter regulado y sujeto a las normas de los ba=
ncos
centrales respectivos. En principi=
o, el
carácter abierto de sus servicios implica la no obligación en el cumplimien=
to
de las políticas de RSC, siempre desde un esquema responsable y de compromi=
so
con la mejora de las condiciones económicas, sociales y ambientales de sus
actividades y prácticas económicas.
En
lo que respecta a los grandes grupos industriales vinculados al modelo de
acompañamiento, el carácter voluntario y responsable es la única posibilida=
d de
cumplimiento con los preceptos que emanan de las políticas de RSC, salvo qu=
e su
IED hubiera recibido subvenciones públicas por parte del país beneficiario =
de la
inversión, en cuyo caso la presión para cumplir con los mencionados precept=
os
sería mayor.
Por
último, aquella IED vinculada a las inversiones de mercado o puntuales por
parte de Pymes, su diversificación y su escaso impacto local hace muy difíc=
il
la implementación de las prácticas de RSC a no ser que sea de forma totalme=
nte
voluntaria y de alcance limitado. =
Lo
mismo que en el caso anterior acontecería en caso de haber percibido
subvenciones públicas, en cuyo caso la presión para el cumplimiento con la =
RSC
local sería más acentuada.
4 Conclusiones
Existen
multitud de estudios sobre lo que significa la aplicación de las políticas =
de
RSC en las actividades empresariales, pero podemos afirmar que entre las
principales se encuentran el respeto al medioambiente, el respeto a las
condiciones laborales y sociales de los trabajadores, las políticas de buen
gobierno y transparencia, así como que estos preceptos sean cumplidos tanto=
por
las empresas multinacionales que invierten en países en vías de desarrollo,
como por los proveedores a los que sub-contratan sus servicios
Sin
duda, la aplicación de políticas de RSC se ha convertido en un estándar de
comportamiento para las compañías multinacionales. La presión ejercida tanto por la socie=
dad
civil a través de ONG, como por organismos internacionales como la OCDE, co=
mo
por los gobiernos que perciben la IED, las obliga a ello. Asimismo, les imprime la obligación mor=
al de
aplicar dichos preceptos, no solo en sus países de origen, sino, sobre todo=
, en
los países en vías de desarrollo en los que realizan sus inversiones a largo
plazo. La instrumentalización de e=
stas
políticas de RSC constituye un coste adicional para dichas organizaciones
empresariales, pero el coste reputacional de no aplicarlas es todavía mayor=
.
Podríamos
afirmar que la RSC vinculada a la IED por parte de empresas multinacionales=
en
Latinoamérica, en su vertiente obligatoria o voluntaria, es positiva para
apoyar la estabilidad económica, social y el desarrollo de la región, ayuda=
ndo
a aunar las ventajas del beneficio económico, beneficio social y riesgo
empresarial. Esta afirmación, sin=
duda,
dispone que las empresas transnacionales que gestionan la IED en la región
Latinoamericana, aplicando la RSC como principio moral y económico de funci=
onamiento,
revierten una mejora para la sociedad que la percibe y por lo tanto, esa
acción, se configura como una ventaja competitiva con respecto a las empres=
as
que no lo hacen.
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